domingo, 7 de marzo de 2010

LUBRICANTES: Sexo con placer



Rey Alexander Rodríguez Cureaux
reyalex1976@gmail.com

(Coordinador de la Línea de Condones / Oficina de Coordinación e Investigación de VIH/sida. Dirección Municipal de Salud de Santiago de Cuba)

“Tío, ¿qué es lubricante?”.

El detonante. Una pregunta infantil, hecha por uno de esos infantes a los que después de la primera respuesta, sigue el conocidísimo cuento de la Buena pipa.

Antes de continuar agradezco a la profesora general integral, cuyo nombre no logré retener (para frustración mía), la incitación al despertar precoz de mi sobrino (seis años de edad).

¿Cómo se le explica a un niño de forma abreviada qué es un lubricante? Primero el diccionario. El mismo ejemplar que acompañó mis años de estudiante: “Lubricante: Dícese de la sustancia que sirve para lubricar”.

Por ahí no era la cosa. ¿La vía más corta?

―Cuando el ventilador no se mueve con la rapidez acostumbrada, ¿qué le echa tu abuelo?

―Grasa.

―Eso es un lubricante, una sustancia que puede ser como un aceite o una grasa sólida, para que los equipos trabajen mejor.

Paz en la tierra, y en el cielo ¡Gloria!

Claro, de esta salí casi ileso, pero dentro de unos añitos más, mi querido sobrino me buscará y, seguramente, me dirá: “Tío, cuéntame la segunda parte”.

¿Qué cuál es la segunda parte? Los lubricantes sexuales. Esos, de los que todos parecen estar al tanto, pero que realmente pocos conocen, al menos cuáles son y cuando usarlos.

Cuentan que en la antigüedad los hombres incrementaban la lubricación natural con el empleo de mezclas y aceites para facilitar sus relaciones sexuales, pero estos compuestos dejaban residuos en los genitales o el ano, provocando la aparición de bacterias y con ellas enfermedades.

Definidos como sustancias naturales empleadas para reducir la fricción entre los genitales o en el ano; aumentan el placer y evitan el dolor durante la actividad sexual.

Se aplica generalmente sobre el glande, en la vagina, en la vulva o en el ano; antes de la penetración.
Los tactos rectales, exámenes ginecológicos, termometría anal y enemas, son prácticas médicas que requieren de su uso; al igual que la masturbación masculina, dado que la lubricación espontánea del pene es reducida, y sólo se produce en estado de excitación avanzada.

¿Son todos los lubricantes iguales? ¿Pueden usarse indistintamente?

1.

Los lubricantes tienen tres formulaciones básicas: agua, silicona y petróleo.

Un lubricante a base de agua es hidrosoluble, y por lo general no irrita las mucosas. Aunque tiende a secarse durante el uso, agua o saliva pueden resolver el problema. Otra de sus ventajas en que son fáciles de remover, una vez terminada la relación sexual.

Aunque constituyen la opción por excelencia para los juegos sexuales en el agua, los lubricantes a base de silicona, no deben ser usados con juguetes sexuales del mismo material, porque los deterioraría.

Por otra parte no son absorbidos como los de base acuosa, y si bien duran más tiempo; también se necesita más esfuerzo para quitarlos de los juguetes sexuales y del cuerpo.

Los lubricantes de base oleosa o de petróleo, son utilizados generalmente para el sexo anal y para la masturbación masculina. Como están compuestos por mezclas de gelatina y aceite mineral, su textura es más gruesa, lo que facilita la penetración.

Atacar el látex, material con que se fabrican los preservativos; y la irritación que causa en la vagina de la mujer, son las principales desventajas de estos productos de base oleosa.

En cuestiones de sexo (siempre protegido), lo mejor es saber escoger.

Otros trabajos del autor

METROSEXUALIDAD: ¿Hombres in pelo en pecho?
http://laislaylaespina.blogspot.com/2008/12/metrosexualidad-hombres-sin-pelo-en.html

EL CONDÓN: No todo está dicho
http://lapolemicacontinua.blogspot.com/2010/03/el-condon-no-todo-esta-dicho.html

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